martes, enero 22, 2008

Hush baby

Hush baby, baby, baby, baby, baby... Don´t you cry. No llores mi niño, verte así, solito en tu cuna me parte el corazón. Hoy nadie fue a verte, y no lo entiendo porque eres tan solo un bebito, un pequeñito hermoso por lo demás. Debo confesar que desde que entre en la sala me fijé en ti, pero existe en mi ese miedo tipico de los adultos hacia los niños, el miedo al rechazo, a causarte más miedo y tristeza de la que ya tenías. Ella se acercó a ti, te comenzó a dar la mamadera, tiene más experiencia, y luego fue a ver a los otros chiquititos. Timidamente me acerqué al borde de tu cunita, dejaste de llorar y pusiste tus ojitos negros en mi. Tomé la mamadera y te la dí, sin despegar tu mirada de mi, te la tomaste toda... tenías hambre. Fui a ver a mi regalona, no quería su comida, pero la convencí y se la comió todita. Te vi, estabas todo lleno de leche, llorabas desconsoladamente, fui corriendo a buscar a la enfermera... mi niño, como quisiera que hubieses nacido de mi vientre, entonces tendrías siempre a tu mamita contigo. Aunque ya estabas limpiecito seguias llorando, me acerqué nuevamente y te mostré mis manos, movía mis dedos sobre tu cunita y tú estirabas tu brazo buscando mi mano, tomé tu manita y apretaste mi dedo indice con fuerza, como pidiendo que me quedara. Comenzé a susurrarte un canción,me mirabas atentamente, tu respiración comenzó a calmarse, te tranquilizaste completamente y tus ojitos comenzarona despedirse de mi. Dulces sueños wuawita.

Que lindo bebito que dios me dió,que lindo y chiquito,que dios me dió.